Peer Gynt o el enigma de ser uno mismo

‘Peer Gynt o el enigma de ser uno mismo’ es el postgrado dirigido por Fernando Soto durante el curso 2020/2021 que se estrenó en en Teatro de la Abadía.

NOTAS DEL DIRECTOR

Enfrentarme a un texto como este de Ibsen hoy en día es tener la sensación de haber estado alrededor suyo durante todos estos años de espectáculos dirigidos y por fin encontrarnos cara a cara. Lo que encierra Peer Gynt en parte es lo que yo como actor y director llevo buscando desde que empecé a dedicarme a este oficio: encontrar la respuesta a la búsqueda de la identidad, el repetido ¿Quién soy?, el poder contarse a uno mismo sin la necesidad de poner la mirada en los demás, en los que nos miran.

El adónde ir o el de dónde venimos más o menos está algo mas claro, o por lo menos es algo que no nos debería preocupar tanto.

Peer Gynt es un buen texto para intentar buscar muchas respuestas a los diferentes comportamientos del ser humano, en relación a los entornos en los que le ha tocado vivir. A parte de este interés, podríamos decir antropológico, que el teatro siempre me ha despertado, hay otras razones por las que decido levantar este espectáculo con actores y actrices jóvenes y una de ellas, la principal, es que la mayoría de los personajes son atemporales, no tienen edad, o si la tienen no responden a ella.

Los personajes en Peer Gynt son mas bien arquetipos, conceptos o actitudes humanas que todos podemos reconocer en nosotros mismos o en la sociedad en la que vivimos.

Es esta la razón fundamental, el hacer que los integrantes de este proyecto tuvieran la oportunidad de enfrentarse a ellos mismos, de ahondar en lo poliédrico que tienen como personas.

Muchas veces ser joven es sinónimo de ignorancia, de irresponsabilidad, etc, pero yo no lo creo, soy de la opinión que lo más pedagógico es la experiencia, con todos sus errores y todos sus aciertos, y por eso poner Peer Gynt delante de ellos era como ponerles un espejo, brindarles la oportunidad de que se expresen como animales sociales que son, que pudieran romper cada una de las convenciones a las que estamos sujetos normalmente, o por lo menos ser conscientes de que tanto los seres humanos como las sociedades o estructuras sociales que conforman, son cuestionables de principio a fin.

Por otro lado, Peer Gynt me permitía plantear un proyecto pedagógico, en el sentido de colaboración de muchos profesionales. Es un texto que contiene muchos lenguajes, música, danza, canciones, audiovisuales, etc, y eso plantea un trabajo muy colectivo, un trabajo de compañía, donde aprender los unos de los otros y que no hubiera ningún tipo de clasismo, a pesar de haber un protagonista, en nuestro proyecto no lo entendemos como tal sino como la parte de un todo.

Es difícil plasmar con palabras todo lo que encierra de bueno nuestra intención. Lo mejor siempre es hacer, ponerse en movimiento y lanzarse a un nuevo viaje… o poniéndolo en palabras del propio Peer Gynt, el camino es el mismo a la ida que a la vuelta, lo mismo da dentro que fuera.